CALENDARIO
Las actividades relacionadas a la Jornada Centenaria del Dr. Ricardo E. Alegría Gallardo serán programadas según nos permita la situación actual, debido a la emergencia mundial de la pandemia COVID-19. La información será difundida en esta sección y a través de las redes sociales.

El Municipio Autónomo de Caguas se une al Comité Jornada Centenaria Ricardo E. Alegría Gallardo (1921-2021) con varias actividades en conmemoración de la vida y obra de tan ilustre puertorriqueño. Durante los días 9 y 12 de noviembre de 2021 se estarán transmitiendo programas especiales con la participación de artistas plásticos que explican cómo ha influido en su obra el haber conocido y compartido con el Dr. Alegría. Los artistas que participarán son: Edwin Báez Carrasquillo, María Elena Perales Guzmán y Samuel Lind.
En octubre de 2020, este municipio llevó a cabo su Festival Típico dedicado entre otras figuras al Dr. Ricardo Alegría.
DATOS BIOGRÁFICOS
Nació en Nueva York en 1954. Sus padres fueron José Báez Bermúdez y Arcadia Carrasquillo Medina quienes regresan a Puerto Rico, en el 1966, para vivir en el barrio Tomás de Castro en Caguas. En el 1977 completó un Bachillerato en Educación en la Universidad de Puerto Rico, Recinto Río Piedras. Báez ha dedicado su carrera profesional a la enseñanza de las artesanías como profesor en el Colegio Católico Notre Dame en Caguas y como artesano residente.
Sus inicios en el arte de la estampa se remontan a su interés por la historia y la cultura puertorriqueña, inspirándose en la casa de su abuela, en los recuerdos de su niñez y las estampas cotidianas de la historia de Caguas. A estos efectos, se certificó como artesano en el Programa de Artes Populares del Instituto de Cultura Puertorriqueña en 1980. Comenzó a participar en las ferias de artesanías a través de toda la Isla. En el 1984 viajó a Ecuador a tomar en CIDAP el Curso Interamericano para artesanos. En Altos de Chavón, República Dominicana tomó cursos de escultura y en la Universidad Ana G. Méndez, Recinto de Gurabo tomó los cursos de Museum Studies del Smithsonian Affiliates en el 1997 y 2002.
En el campo de la artesanía a Edwin Báez se le reconoce como el más excelso representante del arte de la estampa y el retablo puertorriqueño. Trabaja las estampas en diferentes escalas, desde la miniatura del detalle de cada objeto del interior de sus estampas hasta retablos e instalaciones que combinan el relieve medio, el alto relieve y objetos exentos que completan el complejo escultórico. La motivación principal de Báez es recrear una escena que tiene importancia por su contenido temático, histórico o su referencia literaria y querer comunicar al espectador los contenidos significativos de la escena que tiene ante sus ojos.
En agosto del 2015 Edwin Báez es nombrado Artista Residente del Museo y Centro de Estudios Humanísticos de la Universidad Ana G. Méndez, Recinto de Gurabo reconociéndosele la importancia de su contribución como artesano a las artes plásticas puertorriqueñas. En el 2019 se inaugura la Sala Edwin Báez Carrasquillo en la Antigua Casa Alcaldía del Municipio Autónomo de Caguas. Tiene una muestra de más de 30 obras a través de las que su creador reafirma los valores e identidad y reconoce la riqueza de la herencia cultural puertorriqueña. Sobre la colección, el maestro Báez expresa “las estampas y retablos presentes en la sala exhiben diversos aspectos de nuestra experiencia colectiva. Son medios llenos de significados que utilizan como fuente los recuerdos acumulados en nuestra memoria, y nos, invita a celebrar las vidas, acontecimientos y experiencias que forjaron nuestra identidad”.
Tomado de:
http://museo.ut.pr/artistas-residentes/artista-residente-2015-2017
Nació en Caguas, Puerto Rico. Escultora, estudiosa del Arte Urbano y fotógrafa. Es egresada de la Escuela de Artes Plásticas del Instituto de Cultura Puertorriqueña, donde obtuvo dos bachilleratos uno en escultura y otro en pintura. Fue becada por el Instituto de Cultura Puertorriqueña. y continuó sus estudios post-graduados en Escultura y Arte Público en la Academia San Carlos de la Universidad Autónoma de México (UNAM). Realizó cursos de escultura en cemento en los Estudios Montoya de West Palm Beach, Florida.
Varios de los puestos en que se ha destacado son: supervisora de los Museos del Instituto de Cultura Puertorriqueña, secretaria de la Asociación de Mujeres Artistas de Puerto Rico, Presidenta de la Asociación de Escultores de Puerto Rico y Presidenta de la Asociación de Artistas Plásticos (APAP) con sede en el UNESCO en Paris, Francia. Además, es creadora y coordinadora de la Bienal de Escultura en Concreto en Caguas, Puerto Rico.
Ha sido artista invitada a bienales y eventos internacionales como la Bienal Iberoamericana de Lima, Perú, donde dejó una obra permanente recibiendo por esto la Medalla de la ciudad de manos de su alcalde. Ha participado, además, en la Bienal de La Habana, Cuba. Ha representado a Puerto Rico en Israel, Argentina, Costa Rica, Chile, República Dominicana, Venezuela, Panamá, Francia, Grecia, Martinica, Aruba, China, Perú, México, entre otros. Fue Artista Residente de la Universidad del Turabo y escultora invitada por la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Rio Piedras, Recinto de Carolina y la Universidad Católica de Ponce.
En sus años de carrera ha recibido un sinnúmero de premios y menciones, ha celebrado exposiciones individuales y colectivas, la adquisición de sus obras por museos y coleccionistas privados, la realización de arte público en 18 pueblos de la Isla y fuera de Puerto Rico, han sido de mucha satisfacción y de gran valía para esta mujer y artista puertorriqueña.
Tomado de:
https://caguas.gov.pr/nuestros-artistas
Fragmentos de entrevista a Samuel Lind, realizada por Luis Echevarría, para el Adoquín Times:
Loíza… Yo nací en el Barrio de Medianía Alta en Loíza, exactamente frente a los Ayalas, que es la casa que está en la entrada. La historia de los Ayalas y la mía, son las mismas. Yo soy el más chiquito de una familia bien grande. Este espacio, que es mi estudio y mi hogar, era la parte de atrás de la casa de mi mamá, que era un monte con un palmar. Soy de los hijos que se quedó en el mismo lugar donde nació, y estoy aquí solo. Tengo dos hermanos en San Juan y mis hijos viven cerca de aquí.
Niñez… Lo fascinante de mi niñez -la cual fue bien intensa- es que yo tenía mucho elemento a mi alrededor para expresarlo. Entendí desde un principio que lo que hacía gráficamente tenía importancia, pues yo vivía en un ambiente exuberante de naturaleza, de gente anciana, de gente sabia y con un ambiente de mucho color en las fiestas. Mi abuela mantenía Santos, yo hacía sombreros para las fiestas. Mi abuelo tenía un colmado y él me daba papeles de envolver y con eso yo hacía libretas. Me iba al parque, me sentaba, veía una cara y la dibujaba. Dibujar era tan natural para mí y la misma gente me alentaba. En la escuela intermedia me pedían hacer carteles culturales. La maestra me conseguía la (pintura) témpera y me guardaba cartulina. Un día le llevó mi primera pintura al óleo a Don Castor Ayala, ese señor era un filósofo, un maestro, algo increíble. Pues al ver aquella pintura se pone las manos en la cabeza y me dice: “¡Ay Dios mío, Samito tú vas a hacer artista, tus cuadros se van a exhibir en Museos!”.
Escuela de Artes Plásticas… A pesar de que yo vivía en un ambiente bien pobrecito, en un barrio que vivía de la agricultura, yo me enteraba de la movida del arte y procuraba leer todo lo que había. Poco antes de salir de la escuela superior, comencé a ir como oyente a la Escuela de Artes Plásticas cuando estaba al frente del Parque Luis Muñoz Rivera. Yo viajaba sin dinero de madrugada con la gente que viajaba hacia San Juan. Recuerdo que le llevé una pintura al director de la Escuela, y me dijo: “con esa pintura tu no entras aquí… pero tú estás aquí ya”. Al terminar la superior me quedé estudiando con Augusto Marín, quien fue mi maestro de pintura y Luis Hernández Cruz. Comencé a hacer serigrafías y desde ese momento la gente se interesaba en mis cosas y todo lo que hacía, lo vendía. El arte, ante todo, fue mi salvación. Mi primera comisión fue en 1978 para hacer una serigrafía de algo en Loíza cuando Tite Curet Alonso consigue un dinero de la Fundación de las Humanidades y la Bacardí me comisionó un mural. Decidí renunciar a un trabajo que tenía y comencé a vivir de lo que hacía. Si algo para mí se hace fácil, es pintar.
Inspiración… La musa, me hice fanático de los griegos, son unos genios del arte. Vivo dentro de un mundo de ideas, agarro las ideas y las pinto… Decir musa, decir inspiración es innato, “pegao” en mí, porque prácticamente yo vivo conectado. A veces veo cosas que no están en los sentidos, las percibo con el alma. El arte es fabuloso porque tú puedes juntar esas dos cosas. Distinto a otro medio, tú puedes poner una realidad versus la percepción de lo que estás viendo. Unirlo y que la gente lo perciba, no hay que explicarlo técnicamente. Históricamente la misión del arte en la humanidad siempre ha sido la misma, que es comunicar.
Me empezaron a buscar… Venían hasta aquí, hasta el taller y ahora vienen más. Tengo esculturas en pueblos, colecciones en museos y galerías fuera de Puerto Rico. Por ejemplo, en un museo en Filadelfia que he ido dos veces a llevar mis obras, están construyendo edificios nuevos y quieren que yo inaugure el lugar. También he hecho murales para proyectos auspiciado por esa ciudad. Me llamaron de Panamá porque van a tener una actividad grande y lujosa, y quieren que yo exhiba. Me llaman de universidades para dar presentaciones y charlas como fue en Carolina de Norte. En una me pidieron dar un taller de música, increíble. He estado en muchos lugares. También artistas como Paul Simon y Spike Lee han venido a comprar mis obras.
Fragmentos tomados de:
https://eladoquintimes.com/2018/08/13/una-pregunta-mas-a-samuel-lind-yo-necesito-mi-entorno-necesito-mi-gente/
